Aunque a mi ya no me extraña nada a veces me asalta aún una acreditada vergüenza por el insobornable desinterés que existe en esta ciudad por el pensamiento. Por el pensamiento alternativo, claro, porque por el pensamiento castizo de florida neurona dedicado a la dilucidación de los valores estéticos impositivos e irrenunciables (faralaes, masetitas, gitanillas, caballitos, peroletes, cofradías, romerías y otras atrocidades contra la razón pura) lo que nos sobra es entusiasmo.
He esperado un día a que la prensa tuviera tiempo y, claro, no me ha defraudado mi proverbial falta de esperanza. El martes asistí a la magnífica conferencia titulada Las mujeres en las migraciones internacionales que la prestigiosa estudiosa de la condición femenina en el mundo y profesora de La Universidad de París-La Sorbona, Sophie Bessis, pronunció en el salón de actos de la Delegación de la Junta de Andalucía de la calle San Felipe, tras la iglesia de San Nicolás, organizado por la Casa Árabe y el Instituto de la Mujer. Y como era de esperar nuestra prensa, con la honrosa excepción de El Día de Córdoba, no se ha dado por enterada. El acto fue presentado por la Directora de la Casa Árabe, Gema Martín Muñoz, una arabista que frecuenta las páginas de El País, cuyas opiniones y artículos sigo estrechamente, aunque no siempre comparta sus puntos de vista.
En el salón de actos sólo caben un centenar de personas, justo las que asistimos. La profesora Bessis fue desgranando en un perfecto español un montón de datos y confiriéndoles sentido a base de una buena interpretación de los mismos. Todos los asistentes salimos con una idea mucho más cabal de la doble discriminación que soportan la mujeres que han de dejar atrás sus países para buscar una vida mejor.
Al final nos regalaron una bonita agenda y nos fue ofrecida una copa acompañada de unos deliciosos canapés. Me hubiera gustado cruzar algunas palabra con la profesora Martín, pero cada día soy más reacio a esa clase de asaltos.
He esperado un día a que la prensa tuviera tiempo y, claro, no me ha defraudado mi proverbial falta de esperanza. El martes asistí a la magnífica conferencia titulada Las mujeres en las migraciones internacionales que la prestigiosa estudiosa de la condición femenina en el mundo y profesora de La Universidad de París-La Sorbona, Sophie Bessis, pronunció en el salón de actos de la Delegación de la Junta de Andalucía de la calle San Felipe, tras la iglesia de San Nicolás, organizado por la Casa Árabe y el Instituto de la Mujer. Y como era de esperar nuestra prensa, con la honrosa excepción de El Día de Córdoba, no se ha dado por enterada. El acto fue presentado por la Directora de la Casa Árabe, Gema Martín Muñoz, una arabista que frecuenta las páginas de El País, cuyas opiniones y artículos sigo estrechamente, aunque no siempre comparta sus puntos de vista.
En el salón de actos sólo caben un centenar de personas, justo las que asistimos. La profesora Bessis fue desgranando en un perfecto español un montón de datos y confiriéndoles sentido a base de una buena interpretación de los mismos. Todos los asistentes salimos con una idea mucho más cabal de la doble discriminación que soportan la mujeres que han de dejar atrás sus países para buscar una vida mejor.
Al final nos regalaron una bonita agenda y nos fue ofrecida una copa acompañada de unos deliciosos canapés. Me hubiera gustado cruzar algunas palabra con la profesora Martín, pero cada día soy más reacio a esa clase de asaltos.
La Casa Árabe es un proyecto cultural para tender lazos entre España y el mundo árabe que nace con voluntad de funcionar seriamente. La prueba para mí más clara de ello es el nombramiento de Gema Martín como su Directora y como dijo alguien que intervino en el coloquio final, que su primer acto en Córdoba haya sido un acto de pensamiento y no un acto de oropeles, como suele suceder en organismos similares. Cuenta con dos sedes, una en Madrid y otra, aún sin inaugurar, en Córdoba, en la calle Martínez Rucker, a 10 mts. escasos de la Mezquita. El logo que han elegido es la letra ’ain, mi letra árabe favorita, una letra que corresponde a un sonido glotal que no tiene correspondencia con ningún otro sonido de ninguna otra lengua del mundo.
ADDENDUM (05/03/07)