Esta es la escultura del artista alemán Martin Kippenberger (por cuyas obras se dan de hostias (uy, perdón) todos los museos del mundo), colocada en el vestíbulo de un museo del norte de Italia, que ha desatado las iras de los pastores católicos y sus brazos políticos, que han soliviantado a sus ovejas haciéndoles ver que una simple escultura hiere sus más firmes creencias supersticiosas. El Pastor Supremo o Pastor Alemán con nombre de bombardero (B-16) a la cabeza, seguido por el gilipollas que hace las veces de presidente regional, Franz Pahl, que en un ataque de histrionismo propio del catolicismo esperpéntico que tanto les gusta a los latinos, se ha declarado en huelga de hambre como protesta. Espero que resista. El museo, claro, al de la huelga le pueden ir dando... suero con agua bendita si quieren. Aunque como ya sabemos de sobra, ellos siempre ganan. Porque son más retorcidos y tienen mucha más mala leche.
Aunque yo creo que la podían adquirir alguna de las hermandades de penitencia cordobesas, con la acreditada ayuda de su conconfrade Rosita la alcaldiosa, y sacarla en procesión el martes de carnaval. Así podrían compensarnos haciéndonos echar unas risas a los de verdad sufridos ateos que soportamos a lo largo del año sus indesmayables y churriguerescas performances gore-grotescas.
jejeje, ya sabíamos q la iglesia nos salió rana, pero así de concretada se ve con más cuerpo, de rana, claro.
ResponderEliminarahora queda q se recupere el arrojo para poner en evidencia el mal q supone para la humanidad cualquier religión y se restituyan al público aquellas famosas caricaturas del mahoma q tanto dieron q hablar y amenazar.
menudos batracios están hechos estos mercaderes de la religión! (disculpen los batracios)
Pues no estaría mal que la procesionaran en época de sequía.
ResponderEliminarA uno le da por pensar que la representación de un condenado a muerte, torturado y apaleado en una cruz no es lo que se dice un ejemplo de buen gusto. Pero las sectas son así, mucho hablar de respeto y no respetan a nadie.
ResponderEliminarLo que me hace gracia es lo de Franz Pahl, que amenaza con abandonar su carrera política. Estoy por vestir una rana con el manto de la Virgen del Rocío, a ver si nuestra alcaldesa hace lo mismo.
MU bueno lo de las procesiones contra la sequía. Aunque en esta ciudad no creas que haría falta: tenemos a Monseñor Asenjo, Ciervo Mareao (por el incienso), uno de los mejores brujos hacedores de lluvia con linea directa con Manitú, como comenté hace tiempo en este post:
ResponderEliminarhttp://manuelharazem.blogspot.com/2005/09/supersticiones-cordobesas.html
Querido Manuel, habrás de coincidir en que la esculturilla de marras tiene una descarada intención provocativa y burlona. Por una vez, y aunque me joda, he de admitir que lo que ha dicho el Papa-bombardero no deja de ser verdad: la rana crucificada ofende los sentimientos religiosos de muchas personas.
ResponderEliminarDicho lo anterior, también es verdad que seguramente muchos de esos católicos que tanto se ofenden ahora (¿será de verdad un sentimiento de dolor o de orgullo herido?) no tienen reparos en ofender otras sensibilidades distintas a las suyas y, en ese sentido, encuentro justificable tu post, un poco al estilo pues ahora te toca a ti.
En todo caso, no estaría nada mal que pudiéramos reirnos sanamente de todo y no ofendernos por ello. Pero para esa utopía aun falta mucho. Un saludo.
Los que se ofenden con la rana, disfrutaron aplaudiendo en el Congreso cuando ganaron la votación para que España participara en el genocidio de Irak.
ResponderEliminarCon las cosas de comer no se juega... Dicho sea de paso.
ResponderEliminarY es que esa imagen trasnochada imita al mártir que tantos platos de lentejas ha conseguido juntar, por los siglos de los siglos...
Lo que no me cuadra mucho es ese Güevo que tiene en la mano izquierda... o la cartera de la derecha. ¡No lo cojo, Manué...!
Podría ser: Un Güevo pa la izquierda, que la derecha se lleva la pasta.
Se admiten sugerencias...
Salú.
Cartera ??
ResponderEliminarYo creía que era una jarra de cerveza... ¿En qué estaría yo pensando?
Si al clero le ofende esta figura y al de Brasil le ofende la modelo, casi desnuda, con un crucifijo por collar... !que sensibles son!, a mi me ofende las retransmisiones de las torturas y la sangre de los animales por placer salvaje, en los telediarios...
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