Como haciéndole la competencia a su mes antípoda, mayo, el mes de la alegría primaveral, octubre en Córdoba empieza a perfilarse como el mes de la alegría otoñal. Efectivamente las tres actividades más importantes que están teniendo o tendrán lugar en este octubre en Córdoba tienen que ver con una experiencia, actividad o estado alegre donde los haya: LA MUERTE. En sus tres vertientes: natural, violenta y simbólica.
En su vertiente natural ayer mismo se inauguró en nuestra ciudad el X CONGRESO DE FUNERARIAS, cuyo principal tema recoge la evidente crisis del sector, para lo que ha apostado por seguir innovando y buscar soluciones a los servicios que se demandan, entre otras la oferta de incineración de mascotas. Parece que la gente se muere menos y peor o quiere morirse más barato que antes. De hecho una de los puntos a debate ha sido la lucha contra el fraude, ya que mucha gente pretende en los servicios funerarios hacer pasar por mascota a la abuela o al abuelo.
La vertiente violenta está representada por INTERCAZA el salón anual escaparate de los empresarios que surten de armas mortíferas y siniestra parafernalia a los testosterónicos machos de la especie humana que padecen la diversión de salir de su hábitat natural, invadir el ajeno y descerrajarle un balazo en el hígado con el resultado de muerte fulminante a la primera criatura der Señó de otra especie que se le ocurra salir de su madriguera para cumplir con su trabajo diario de alimentarse y alimentar a sus crías.. Por cierto que aplaudimos la decisión del Ayuntamiento de cubrir con unas lonas el monumento a los papás de Bambi recientemente colocado a los pies del Hombre Pájaro del Puente Nuevo, para evitar tentaciones a los pegatiros que vengan de fuera y se piensen que se tratan de blancos expresamente colocados para ellos.
En cuanto a su vertiente simbólica está previsto para el día 15 la apertura del III SALÓN COFRADE, en el que se presentarán las últimas tendencias de la moda relacionada con el Culto a la Muerte del Profeta-Dios de los católicos. Para la temporada pascual que viene se están imponiendo los colores rabiosamente tumefactos que hagan juego con las llagas y moretones de las representaciones que de esa Muerte procesionan y los cortes tipo sudario para las enagüillas de los pasos.
Lo único que falta es que se implemente una corrida de toros, con rejones de muerte a ser posible. o un congreso de matarifes finos. Que por algo estamos en la Ciudad de la Toreancia del Dormidisisái.
¡¡¡¡Alegría, alegría!!!! ¿Será todo esto una metáfora o... peor aún... un augurio?