(del laberinto al treinta)


lunes, 17 de julio de 2006

EL DÍA DE CÓRDOBA me censura

Es la segunda vez en unos meses que en EL DÍA DE CÓRDOBA no me publican una carta. Ya sé que no tienen por qué hacerlo, pero yo me considero censurado, dadas las características de los hechos.

La primera fue una contestación a Pérez Azaústre tras haber arremetido insultantemente en una columna de ese diario contra los que, como yo, luchamos con argumentos racionales contra la construcción de la torre Prasa. La carta estaba redactada en términos más moderados que los usados por nuestro joven, aunque eximio, escritor.

La segunda la envié hace una semana en contestación a dos artículos del catedrático de la Universidad de Murcia, Francisco J. Guillamón Álvarez (EL DÍA DE CÓRDOBA , 11 - 12 de julio de 2006) en los que trata de rescatar para el santoral demócrata a José María Pemán. Copio la carta censurada:


La pequeña, pero aguerrida, corte de historiadores, Pío Moa y César Vidal a la cabeza, interesados revisionistas de la historia de la guerra civil española y la posguerra, defienden dolosamente una enmienda a la totalidad a las tesis de la historiografía mundial más acreditada. Aunque peligrosas, sus groseras afirmaciones son fácilmente rebatibles desde la racionalidad y el estudio. El señor catedrático de Historia Moderna de la Universidad de Murcia, Francisco J. Guillamón Álvarez en su articulo sobre Pemán esconde la misma intencionalidad de enmarañamiento de la memoria histórica que aquellos, aunque lo hace prudentemente tras el enunciado de sólo enmiendas a la parcialidad, rescatando uno a uno a ciertos personajes. Presentar a José María Pemán como un demócrata tardío, pero convencido, tendría que merecer el epíteto de "afirmación delictiva", sólo posible en un país como éste en el que cientos de fascistas y criminales de guerra, de la misma calaña y casi con los mismos crímenes a cuestas que los que nazis alemanes y fascistas italianos purgan en la memoria de todos sus paisanos actuales, campan por la nuestra sin castigo. Porque le pusieron buena voluntad al asunto. José María Pemán, aparte de un deleznable escritor, fue un conspicuo fascista, cómplice de los crímenes de guerra del ejército golpista y del genocidio de demócratas programado posterior y enaltecedor entusiasta y convencido de uno de los dictadores más sangrientos del siglo XX. Que lo hiciera para salvar la putrefacta monarquía alfonsina, aparte de demostrar su profunda hipocresía, no le quita un ápice de culpa. Ya va siendo hora de que Cádiz retire de sus calles cualquier resto de su memoria. Y de desenmascarar a los catedráticos que exculpan a personajes como él.

Comentarios
Curiosamente el día que escribí a este joven pero no sobradamente informado acerca de su equivacada formación en relación a Blas Infante y el andalucismo me pidieron que redijera el texto a tal tamaño que como mucho serviría de esquela. Al serme imposible contestar a tantos desatinos escritos en un par de líneas, desistí.¿Quién será su padrino?
Mike Chapel — 29-07-2006 21:32:24
Supongo que te refieres a Pérez Azaústre. Mi carta no se perdió. La colgué en el foro de Calleja de las Flores, y en una entrada más abajo mi alucinada perplejidad por otro artículo suyo sobre la cantante cordobesa Vega. En fin, los hay peores, pero no con tan mal genio.http://www.callejadelasflores.com/foro/viewtopic.php?t=41&sid=a006369412dec5f025cd10660fb191d9
Harazem — 30-07-2006 10:22:18

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El "democratismo" no canoniza a nadie, ni le quita méritos tampoco. Demócrata es Bush y no demócrata Platón...y ahí están los dos, cada uno con lo suyo.
Un juicio tan sumario y despectivo sobre Pemán y sus méritos literarios, cabe sólo en alguien que no conoce a Pemán. Particularmente estoy convencido que es de los más sutiles y profundos captores de la Andalucía más auténtica. Negarlo, es ponerse en evidencia.

Saluti!

harazem dijo...

Yo hablaba únicamente del aspecto político del escritor gaditano y denunciaba sólo el fraudulento intento del aventurero catedrático de santificarlo como demócrata. Si el amigo Terzio quiere confundirlo todo mezclando platones con zarzas es libre de hacerlo. Yo digo que Pemán fue un fascista de tomo y lomo y cómplice de crímenes de guerra. Como Karadzic.

Y añado además, de paso, que fue un deleznable escritor. Aunque hay gustos para todo. Si el amigo Terzio se solaza en la lectura de ese saco de topicazos infumables sobre el alma de Andalucía que es el "Séneca" es muy dueño de hacerlo. Y desde luego evidencia lo que para él es el alma de Andalucía. Lo mismo que evidencia lo que es para mí. Años luz de separación. Afortunadamente.