(del laberinto al treinta)


miércoles, 19 de septiembre de 2007

Los criminales tienen la lengua larga

Mi humildísima contribución a la causa del pueblo palestino en el aniversario de la matanza de Sabra y Chatila, víctima indefensa de los gobiernos de EE.UU. Gran Bretaña e Israel y de la pasividad cómplice y cobarde del resto de occidente será una recopilación de jirones sueltos del pensamiento de los responsables. Los criminales tienen además la lengua larga. Los acabo de recoger el libro de Arundhati Roy Retórica bélica Anagrama, 2005.



Por lo que a Palestina se refiere, no tenemos la más mínima intención de consultar los deseos de su población actual, ni siquiera como mera formalidad... El sionismo, tanto si es correcto como si no, tanto si es bueno como si no, tiene sus raíces en una larga tradición, en las necesidades actuales y en las esperanzas para el futuro, y esas raíces son muchísimo más importantes que los deseos o las opiniones de los setecientos mil árabes que viven actualmente en ese antiguo país. Lord Arthur James Balfour, ministro británico de Exteriores en 1917 (Citado por Noam Chomsky: El Triángulo Fatal: Estados Unidos, Israel y Palestina. Madrid, Editorial Popular, 2002)



No estoy de acuerdo en que el perro de un establo tenga derecho absoluto a ese establo, aunque lleve mucho tiempo vigilándolo y durmiendo en él. No admito ese derecho. No admito por ejemplo que se haya cometido una injusticia con los pieles rojas de los Estados Unidos, o con los aborígenes australianos. No admito que se haya cometido una injusticia con esos pueblos por el hecho de que una raza más fuerte, una raza de cualidades superiores, una raza con más experiencia de la vida, por así decirlo, haya llegado a sus tierras y haya ocupado su lugar. Winston Churchill (1937). Citado en el editorial Scurryin Towards Bethelem, New Left Review, 10 julio-agosto 2002.



Los ataques directos contra objetivos habitados (per se) no sólo son susceptibles de provocar una oleada de repulsión tanto en los Estados Unidos como en el extranjero, lo cual sería contraproducente para nuestros intereses, sino que incrementaría en gran medida el riesgo de una guerra con China o con la Unión Soviética. La destrucción de las esclusas y las presas, sin embargo, si se realizara de una manera correcta, podría (...) resultar útil. Es un tema que debería estudiarse. Es una clase de destrucción que no mata ni ahoga a la gente. La inundación de los arrozales provocaría, al cabo de un tiempo, una hambruna generalizada (¿afectaría a un millón de personas, tal vez?, a menos que se proporcionaran alimentos a los afectados, algo que podríamos ofrecer “en la mesa de negociaciones”. (1964) John McNaughton, ayudante del ministro de Defensa estadounidense en el periodo Nixon. De los papeles recientemente desclasificados del Pentágono.



No tengo ningún problema de conciencia. La ANC es un grupo terrorista. (Dick Cheney tras votar en contra de la House Resolution 373 (agosto de 1986), por la que se instaba al Gobierno de Sudáfrica a eliminar el régimen de apartheid, reconocer al ANC y establecer negociaciones políticas con él, así como a liberar a Nelson Mandela y otros líderes encarcelados.)



¡Estamos contentísimos con los investigadores de la Dow Chemical! El producto original no era tan mortífero: si aquellos a los que les caía encima se daban prisa, se lo podían quitar. Por eso los científicos probaron a añadirle poliestireno, y ahora se pega como una cola. Pero si la gente se tiraba al agua, dejaba de arder, por lo que le añadieron fósforo blanco, para que ardiera mejor. Ahora arde incluso dentro del agua. Y basta con una gota, porque arderá hasta llegar al hueso, y a quien lo reciba morirá sin remisión de envenenamiento por fósforo. Un piloto norteamericano encargado de regar de napalm los poblados vietnamitas. (Philip Jones Griffith: Vietnam Inc. NY, 2001)



No podemos permitir que un país se haga Marxista por la irresponsabilidad de su pueblo. Henry Kissinger para justificar la preparación del golpe de estado de Pinochet en Chile, directamente instigado por él.



Los palestinos no existen (Golda Meir).


Los palestinos son bestias de dos patas (Menahem Begin).


Los palestinos son como las langostas, sólo buenas para ser aplastadas (Yitzhak Shamir).


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Impresionante, Manuel. Me guardo la referencia del libro ;-) Gracias.

alfonso dijo...

joder! Joder! JOder! JODer! JODEr! JODER!. Con esta lógica creciente. ¿Por qué no exterminarlos a ellos?